darle al rollo hacia atrás,
envolver como tela en la mesa,
tendida,
la extensión de la vida
que hemos visto pasar.
Y enrollar arco iris,
y envolver las auroras
que velaron mis sueños,
y tender a lo largo
las noches y los días,
y con mis propias manos
rodarlos hábilmente
hasta hacer un cilindro compacto,
que contenga mi existencia completa,
y, tirármelo al hombro,
y caminar callado
pero gallardamente
entre la muchedumbre que me verá pasar,
y arrancarle a mi alma
una leve sonrisa
...y tirar todo al mar.
© Gabriel Moquete
Que bonito poema, se maneja muy bien en versos libres amigo Gabriel.
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